Happy Brick

Happy Brick es un arcade en el que los jugadores controlarán un bloque negro con el que tendrán que intentar llegar tan alto como les sea posible, atravesando pequeños huecos entre franjas horizontales de colores y otros bloques.

El sistema de control de Happy Brick es muy simple: tan sólo tendremos que pulsar en la izquierda de la pantalla para hacer que nuestro bloque bote a la izquierda, o pulsar a la derecha para hacer que nuestro bloque bote a la derecha. Sin embargo, pese a la sencillez de su mecánica, el juego no es fácil en absoluto. Además, el juego es sensible a la presión y al tiempo, haciendo que el cubo reaccione de modos distintos según nuestro toque.

Aunque el espacio por el que tenemos que hacer pasar nuestro bloque es amplio, este está lleno de pequeños bloques intermedios que hacen del juego un título endiabladamente difícil, haciendo que en ocasiones tengamos que intentar recular un poco nuestro avance para poder seguir adelante y convirtiendo cada subida de nivel en un auténtico logro.

Happy Brick es un juego muy, pero que muy difícil, que pondrá a prueba tanto nuestra habilidad como nuestra paciencia. Uno de esos títulos perfectos para terminales táctiles, cuyas partidas durarán en torno a cinco segundos... si tenemos suerte.